jueves, 23 de octubre de 2014

Reposo absoluto y otras dulces cosas

Me caí mientras me estaba riendo con las manos cargadas con dos bolsas, así que la rodilla fue el único parapeto contra el suelo. La gravedad esa que nos hace tan humanos.
Pero no te engañes, que no soy quejica. Se me inflamó mucho y no fui de urgencias, ni tan siquiera pedí hora al traumatólogo, porque pensé que con un poco de Voltarén se me pasaría. Y efectivamente, al principio parecía que mejoraba pero una semana después yendo a acompañar a mi hija al médico al volver estaba mucho peor. Así que fui al médico, radiografía y resonancia, toma ya. Nunca me había hecho ninguna.Pero acerté en llevar falda porque así no tuve que desvestirme ni nada. Qué ruido. Cuando así de pronto me dice: durará unos 30 minutos no puede mover ni manos ni pies, me entró un poco de mal rollo. Pues casi que me duerma, dije en  voz alta. Si, puede hacerlo dijo el joven.
Me dormí. Mira habrá quién no sepa, yo digo en broma que es una capacidad que tengo, mi marido se ríe y sorprende a partes iguales. Cuando vamos a esquiar a Vielha, hay un tramo de curvas que no me gustan. Cuando nos acercamos a ellas le digo voy a dormirme ¿vale?. Y un minuto o dos más tarde ya duermo.
Y salgo de ellas y me despierto.
Así que aunque el ruido al principio era molesto traté de buscarle una pauta, me relajé y ya está.
El viernes me darán los resultados.
El traumatólogo me dijo que reposo en seis semanas.
La buena noticia, es que ya no tengo excusa para no escribir, todos los días, a ver si acabo de terminar una recopilación que estoy haciendo.
En fin, aquí sigo, para lo que quieras contarme.



Cumpleaños Feliz, hija.

 Ayer cumplió 17 nuestra hija pequeña, sí, la de los ricitos, la que era menudita pero muy espabilada,  la que acompañaba a su hermana mayor...