miércoles, 28 de mayo de 2008

Los diez secretos de la abundante felicidad

Una vez en semana voy a la “deixalleria”, algo así como un centro de reciclaje de basuras, allí llevo los tetrabrics, las botellas de plástico del agua y de productos, vidrio, pilas, bombillas, bolsas de plástico. Lo bueno de ese sitio es que siempre hay algo que “reciclar”. El otro día era una estantería de mimbre en perfecto estado, otro una enciclopedia con todos sus tomos, de acuerdo era de los años 80, pero daba una pena verla allí. Y como son muy majos los que trabajan allí han montado un rincón donde dejan los libros que llevan, en vez de tirarlos al contenedor del cartón. Hubo una temporada en que cada vez que iba me paseaba por ese rincón y rescataba de su triste fin algún libro, y cuando veía títulos importantes me decía pero como pueden tirar a la basura La Casa de los Espíritus, o uno de Gala encuadernado en piel. En fin que en una de aquellas incursiones me llevé un libro muy sencillo pero de título rimbombante, ni más ni menos que el que he tomado prestado como título del post. Me eché a reír hombre cualquiera dice que no a la felicidad, pero no a una felicidad cualquiera no, sino a la abundante… en fin que me lo dejé en el coche, como otros libros que tengo allí para leer en las esperas o en las siestas de la peque.
Ya voy por el octavo secreto... me acerco, me acerco.

Un abrazo

lunes, 26 de mayo de 2008

Propuestas personales para consumir menos carburante.

Ayer hablaban de la subida del petróleo y comentaban que resultaba un tanto sorprendente en tiempos de “desaceleración económica” (expresión eufemística donde las haya para sustituir a la siempre inoportuna e impertinente de crisis). Y como lo único que me quedo claro es que de momento los precios no van a ir a la baja en fin que a continuación os dejo mis propuestas particulares, factibles que no hipotéticas, medidas a adoptar:

-Llevar y traer a la niña al cole andando, es un paseo y ahora el tiempo acompaña. A ella le encanta y sólo supone salir un cuarto de hora antes de casa. (1 punto por trayecto)

-Comprar en el super del pueblo en vez de ir a 7 kms a un centro comercial, de todos modos aunque sea un poco más caro, seguramente el pretendido ahorro se esfuma en el consumo del carburante. (7 puntos)

-Dejar de ir al videoclub que está enfrente de mis suegros, porque implica luego tener que devolverla allí. (12 puntos)

-Ir un día a ver a mi madre a Barcelona en transporte público con la peque, bus o bus y tren, para ver cuanto se tarda y tener la alternativa al coche. Seguramente sea este miércoles. (25 puntos)

Y para ver el resultado de mis actos nada más fácil que comprobar cuanto tiempo consigo estar sin rellenar depósito, el jueves pasado puse unos 45 euros.

Un saludo

Pd. He añadido una puntuación valorativa en base a los kms. que se realizan, que me ha parecido práctica. En fin a ver que sale.

Cumpleaños Feliz, hija.

 Ayer cumplió 17 nuestra hija pequeña, sí, la de los ricitos, la que era menudita pero muy espabilada,  la que acompañaba a su hermana mayor...