Hacía días que las niñas no iban a casa de mi amiga. Una quiso ir al lavabo la otra empezó a corretear por el salón, luego quiso subirse a la cama, después tenía sed en fin que mi amiga le iba diciendo no hagas esto no hagas aquello y de pronto un minuto de paz, nos pusimos a charlar hasta que me tira del brazo para hacerme una pregunta al oído...¿puedo tocar el suelo?
Me eché a reír.
2 comentarios:
Una pregunta curiosa, no? Un beso, SONIA.
Una pregunta que era toda una constatación. ;)
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